Pues sí, fue un mete y saca continuo con la médula para poder llegar a hacer una flor posavasos, original y divertida. Gema nos enseñó la técnica, nos contó amenamente el cómo y con qué hacerlo bien. Fueron pasando varios grupos y todos se lo pasaron fenomenal, unos con más habilidad que otros, pero cada cual acabó con su flor, incluso yo (ahora la tiene paula Emma en su habitación). Y valoramos el oficio de cestero, de artesano, conocimos historias y materiales. Buen taller. Muchas gracias Gema.
La médula debe estar húmeda para que se pueda trabajar bien. Después habrá que girar, doblar,meter, sacar, pero debe mantenerse la humedad para realizar un buen trabajo. ¿Verdad Gema?
Así haciendo aros, dando vueltas y....al agua, a esperar que esté en su punto para trabajar, mientras, nos cuentan los materiales con los que se trabaja en la zona: el castaño, el mimbre....Nosotras y nosotros utilizaremos médula que viene de la India, más manejable y barato.
Ya concentrados y concentradas, comienza la sesión. Vuelta y giro, dentro y fuera, suavemente, con gracia, con estilo, el posavasos va creciendo.
Venga Laura, ánimo Guada, esa postura Rubén....qué interés y concentración. Los artistas creando, el mundo que gira.
El detalle es importante, la colocación, el momento justo para hacerlo. Hay que mirar detenidamente, utilizar los dedos con habilidad y destreza. A ello pues.
Atender a las explicaciones, valorar el trabajo artesanal, demostrar simpatía por quien se dedica a esto. Bonito relato que acompaña al buen hacer de quien quiere llegar al final.
Este fue mi grupo de cestería. Menudo lío me hice con tanta médula y tanta entrada y salida.
Pablo sí parece entender por donde hay que pasarla. Hay que ser constante y preciso. Bien.
Inma sí que sabe, centro perfecto, pétalos uniformes,manos rápidas y hábiles mientras se reía de mis meteduras de dedos. Muy bien.
Y al final quien se ha esforzado, quien lo ha hecho con cariño, quien metió y removió sin sacar, esos y esas obtuvieron su justo premio: una bella flor. Enhorabuena.
Un nuevo grupo que pasó por las manos de Gema. Floreció Granadilla con tanta flor de médula. Las casas se adornaron y llevaron mensajes de complicidad más allá , a Arroyo, a Sanlúcar y a Andújar.
y con tanto mete y saca, tanta agitación , tanto taller de cestería, las sillas sufren, se desencolan, pierden brillo,...hay que arreglarlas. La postura no importa mucho, siempre que se haga bien.
Esto fue todo lo que de cestería pude contaros, cada cual que saque conclusiones y se lleve recuerdos.
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